Quién inventó el espejo infinito

Los espejos infinitos son una ilusión visual que se ha utilizado en el arte desde hace muchos años. Este efecto se crea al colocar dos espejos alineados con sus caras opuestas, de manera que la imagen reflejada en uno de los espejos se refleja infinitamente en el otro.

Si bien los espejos infinitos son una técnica artística muy popular en la actualidad, su origen es desconocido. No se sabe con certeza quién inventó esta técnica o en qué momento histórico se originó.

Teorías sobre el origen

A pesar de que no hay una respuesta definitiva sobre quién inventó los espejos infinitos, hay varias teorías sobre su origen:

Teoría japonesa

Algunos creen que los espejos infinitos se originaron en Japón. Se dice que esta técnica se utilizó por primera vez en el siglo XVIII en la creación del Tochūka, un objeto que se utilizaba en la ceremonia del té para reflejar la luz de una vela y crear una atmósfera tranquila y relajante.

Teoría europea

Otra teoría sugiere que los espejos infinitos se originaron en Europa. Se cree que fueron utilizados por primera vez por el artista belga Joaquín Desiderio Ortega en la década de 1960 en una serie de pinturas llamadas «Espejos infinitos».

Teoría australiana

Por último, hay una teoría que indica que los espejos infinitos se originaron en Australia. Se dice que se utilizaron por primera vez en la década de 1940 en el campo de batalla para engañar a los aviones enemigos y hacerles creer que los tanques y los camiones eran más grandes de lo que realmente eran.

Uso en el arte

Independientemente de su origen, los espejos infinitos se han utilizado en el arte de muchas formas. Uno de los ejemplos más famosos es la obra «Infinity Mirrors» de la artista japonesa Yayoi Kusama. Esta instalación consiste en una habitación llena de espejos infinitos que crean la ilusión de un espacio infinito.

Otro artista que ha utilizado los espejos infinitos es el fotógrafo y escultor americano Doug Aitken. Aitken crea instalaciones de espejos infinitos que reflejan el paisaje natural y crean una sensación de infinitud y continuidad.

Conclusión

En resumen, aunque no se sabe con certeza quién inventó los espejos infinitos, sí se sabe que se han utilizado en muchas formas de arte y son una técnica muy popular en la actualidad. Ya sea que se originaran en Japón, Europa o en Australia, lo que es seguro es que esta ilusión visual ha dejado su huella en el mundo del arte.

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