Por qué los árboles atraen los rayos

¿Por qué razón cae un rayo en los árboles? No es nada extraño, los árboles actúan como un pararrayos. Esto se hace por la fácil razón de que la electricidad siempre y en todo momento busca el sendero mucho más claro, el que da la menor resistencia al descargarse de las nubes a la tierra.

Pues llovizna a lo largo de las tormentas y de ahí que están mojadas. Además de esto, el árbol es un grupo de materiales orgánicos (madera, hojas, copas…) con mucha agua, que es conductora.

Aparte de ser altas y mucho más expuestas, sus ramas acaban en punta, con lo que el efecto de acumulación de cargas eléctricas en los extremos nucléa la diferencia de potencial.

Cuadros sándwich de poliuretano en frente de la caída del rayo

Pese a las geniales posibilidades aislantes de los cuadros sándwich, la existencia de chapas todavía expone ciertas inquietudes sobre su accionar en oposición al rayo hecho ahora la radiación. Es un fallo meditar que las construcciones metálicas tienen la posibilidad de atraer rayos a lo largo de una tormenta eléctrica, pero las posibilidades de que ocurran no están similares con el material de construcción.

La posibilidad de que un rayo caiga sobre un tejado es dependiente de la localización y la altura del edificio. La localización en el punto mucho más prominente de la región, la enorme altitud en relación a las edificaciones circundantes, la cercanía a postes o árboles altos, la continuidad con la que se generan tormentas en la región… son varios de los componentes que influyen en la caída de un rayo

High Plains

Los relámpagos procuran el sendero mucho más veloz y mucho más corto entre las nubes y la extensión de la tierra, con lo que hay una mayor oportunidad de pegar lomas, picos de montañas y inmuebles, y chocar contra áreas llanas y profundas.

Por ser enormes y de corona puntiaguda, son enormes atrayentes y pararrayos. Además de esto, al estar en zonas de lote húmedo, no han de ser considerados cobijos de tormentas por ningún fundamento.

Cañerías y cables

Los rayos tienen la posibilidad de traspasar en las construcciones mediante cañerías y cables metálicos, que son conductores potenciales y causan graves daños materiales. Más allá de que es preferible resguardarse bajo techo a lo largo de una tormenta, el encontronazo inmediato en el cableado y la plomería puede lesionar a los ocupantes. La manera mucho más eficaz de eludir o sea disponer sistemas de pararrayos en la infraestructura.

Los productos conectados a los tomacorrientes asimismo gustan rayos (en especial cerca de puertas y ventanas) y otros gadgets como teléfonos con cable, duchas y grifos, con lo que tienen que conectarse a un sistema de conexión a tierra para eludir daños.